El Consejo de Ministros aprueba el Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, por el que se declara el estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria generada por el coronavirus COVID-19.
Una de las consecuencias de la crisis del COVID-19 es poner de manifiesto la fragilidad de las personas dependientes en sus domicilios, más ante este tipo de circunstancias adversas.